Happy slapping: qué es y por qué es tan cruel, es una práctica que se hace en ocasiones entre adolescentes que consiste en grabar con un móvil la agresión a la víctima y difundirlo por las redes sociales.
Happy slapping una tendencia que se hace viral
Cuando comenzó, todo se hacía pegando bofetadas a desconocidos mientras se grababa con un móvil y posteriormente se subían a redes sociales. Los adolescentes que hacían esto pensaban que era gracioso humillar a personas de cualquier edad haciendo esto. Pero nada más lejos de la realidad.
El happy slapping nació en Reino Unido en 2005, pero ya es un término que se utiliza en todo el mundo. Es una práctica que consiste en grabar una agresión con el móvil para después publicarla en la red y hacer ciberbullying a las víctimas.
La agresión puede ser física o verbal y se extiende como la pólvora por los medios sociales. Desgraciadamente, en algunos casos se hace viral y la víctima se siente terriblemente humillada y vejada, no solo por sus agresores sino también por todas las reproducciones que tiene el vídeo.
La víctima de happy slapping no solo es sometida a un maltrato físico, sino que luego se humilla aún más al compartir su ataque en línea para que otras personas reaccionen. Esta acción constituye una forma de ciberacoso.
Muchas veces, la búsqueda de likes o de ser popular hace que los adolescentes utilicen esta técnica cruel de acoso en compañeros o amigos.
La agresión puede ser planificada o espontánea, pero, en cualquier caso, después se cuelga en medios sociales como entretenimiento y ganar seguidores.
En la actualidad
En la actualidad existen diferentes maneras de realizar esta práctica, que sigue una serie de patrones que se deben conocer para identificarla y denunciarla lo antes posible:
- Es planificada normalmente por preadolescentes y adolescentes.
- Suele llevarse a cabo entre iguales de la misma edad.
- La víctima puede ser conocida o desconocida.
- Se produce una agresión física que puede ser bastante violenta.
- Suele llevarse a cabo en grupo y la víctima, por lo general, está indefensa.
- Se graba con un móvil.
- Se difunde el vídeo por las redes sociales o por aplicaciones de mensajes.
Por supuesto, esto tiene consecuencias. De hecho, es delito porque hace daño moral a otra persona, así como daño a la integridad física y también la imagen.
Al difundirla de manera pública a través de internet, se vulnera el derecho a la intimidad de la víctima, lo que está penado por la ley.
Las personas que hacen la agresión cometen un delito, pero también lo hacen quienes graban el vídeo, aunque no participen en la agresión física como tal. Otros que también cometen delito (posiblemente sin saberlo) son todos aquellos que difunden las imágenes por los medios sociales.
Si hay testigos que no socorren a la víctima, también estarían cometiendo un delito de omisión de socorro. No es un juego, es acto que está penado y que quien lo lleve a cabo debería encontrar las consecuencias de hacerlo.
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